El dólar estadounidense cerró a baja el miércoles, mientras los inversores esperaban el informe de precios al consumidor (inflación) el jueves en Estados Unidos, el cual dará una señal más clara sobre las próximas políticas económicas de la Reserva Federal (FED).
El dólar registró pérdidas más pronunciadas al inicio de la sesión, particularmente después de que los datos mostraron que la economía china cayó en deflación el mes pasado. Eso aumentó las posibilidades de que China lanzara medidas de estímulo adicionales, empujando a los inversores a los activos de riesgo.
La venta de dólares informada por los bancos chinos de propiedad estatal también ayudó al yuan a recuperarse desde un mínimo de un mes, dijeron los operadores. La fijación del tipo de cambio más fuerte de lo esperado por parte del banco central chino en $ 7,1588 por dólar antes de la apertura señaló su malestar con las recientes caídas del yuan.
El dólar cayó un 0,1% frente al yuan extraterritorial a $ 7,227.
Los inversores ahora están enfocados en los datos de inflación de EE. UU. del jueves, que cobran gran importancia en un mercado hambriento de pistas sobre el camino de la política de la FED. Los economistas de Wall Street esperan que el índice de precios al consumidor (IPC) básico interanual haya subido un 4,8 % en julio, sin cambios con respecto al mes anterior.
"Todavía estamos bastante convencidos de que la inflación en los EE. UU. continúa disminuyendo, impulsada por una desinflación en los precios de la vivienda, que es el 35% del índice general del IPC", escribieron los analistas de Macquarie dirigidos por el estratega de tipos y divisas Thierry Wizman.
"Esperamos que el IPC pueda estar en el lado bajo de las expectativas (4,7% año tras año) y lo haga debido a la desinflación en los alquileres primarios y equivalentes a propietarios".
El índice del dólar (DXY), que mide el rendimiento de la moneda estadounidense frente a otras seis, cayó un 0,1% a 102,46 puntos, revirtiendo en parte la subida del martes.
El euro subió un 0,2% a US$ 1,0976 dólares, mientras que la libra esterlina cayó un 0,2% a 1,2721 dólares.
Los mercados europeos ganaron después de que las acciones cayeron el día anterior cuando el gobierno italiano anunció un impuesto inesperado del 40% a los bancos privados.
Posteriormente, el Ministerio de Finanzas de Italia aclaró que la medida única, que apunta a las ganancias de las tasas de interés más altas de los bancos, no ascendería a más del 0,1% de sus activos totales.
En China, los precios al consumidor del país cayeron por primera vez en más de dos años en julio. En lugar de despertar el apetito por el dólar como refugio seguro, las cifras reforzaron la opinión de que el gobierno chino podría tomar medidas para apuntalar la economía con estímulos monetarios.
También hubo señales más moderadas de los funcionarios de la FED durante la noche, con el presidente de la Fed de Filadelfia, Patrick Harker, sugiriendo que las tasas de interés ya son lo suficientemente altas , haciéndose eco de la opinión del presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic.
Sin embargo, el mensaje ha estado lejos de ser uniforme, ya que la gobernadora de la Fed, Michelle Bowman, dijo el lunes que es probable que haya más aumentos.
Frente al yen, el dólar subió un 0,2% a 143,70 yenes.
"Con el diferencial de rendimiento a 10 años entre EE. UU. y Japón aún manteniéndose en aproximadamente el 3,4 %... y la perspectiva de cualquier subida de tipos oficial del BOJ (Banco de Japón) aparentemente retrasada, el dólar/yen ha reanudado su año a año.
Reuters.
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